lunes, 17 de mayo de 2010

Homofobia: enfermedad crónica de la sociedad mexicana ( reportaje)




El siglo XXI está alcanzando ya la primera década; sin embargo, todavía existen serios problemas de discriminación en otro a la comunidad homosexual, la cal sigue siendo vista como pecaminosa e inmoral. Esta óptica errónea ha dado como fruto a diverso actos criminales de agresión, física, verbal, psicológica y moral a la comunidad Lésbico Gay Bisexual Transexual Transgénero e Intersexual.(LGBTTI)


Asistí las bodas masivas entre matrimonios del mismo sexo en Arcos de Belem. Activistas y fotógrafos abarrotaron el lugar. Familiares y amigos se veían gustosos y las parejas, satisfechas. Lo considero un gran avance; un logro. Sé que muchos amigos y amigas están en trámites para poder unirse y darse un mutuo respaldo legal. Ahí estaba, Cristi y Ana, dos chicas regiomontanas que viajaron con todo e hijos hasta al ciudad para poder casarse. Se veían felices, los cuatro.
La escena en sí era placentera, pero los fotógrafos de medios y la manera en cómo comentaron sus noticias me hicieron temblar emitieron un juicio, una burla hacia esta situación, como si asistieran al circo.


En América Latina, México ocupa el segundo lugar en homofobia

La consumación de las primeras bodas gay provoca que algunos sectores cedan en su oposición. El 52% de la población nacional aceptaría legalizar estas uniones (ocho puntos más que en enero), la primera vez que esta posición constituye mayoría. En la Zona Metropolitana de la Ciudad de México, la aceptación asciende a 61%*

El rechazo total a estas uniones va en retroceso: 38% dice que no debe legalizarse bajo ninguna circunstancia, 24 puntos menos que en diciembre de 2000 y ocho menos que en enero pasado. La aceptación a estas uniones sigue teniendo matices: una parte, la más extendida, se inclina porque tengan los mismos derechos que los matrimonios heterosexuales (38%), pero otra cree que deben contar con menos derechos (22%), *


Se estima que entre el 10 y 20 % de la población en México no es heterosexual; sin embargo, la mayoría de ellos elige mantener al margen su preferencia sexual para evitar ser despedidos o despedidas de su trabajo. Las reacciones homofóbicas contra la comunidad lésbico, gay, bisexual y transexual ya se están generando. Se dice que mientras haya mayor visibilidad, es más probable que crezca el rechazo”, dice el escritor y periodista Fernando del Collado.

El domingo 14 de marzo, dos chicos fueron agredidos en Zona Rosa por ser gays. Los insultaron y abofetearon, y les dejaron una memoria usb con un video en pro de la homofobia. El grupo agresor se llama Justicia Ciudadana y están realizando una “limpieza de conciencias” presentaron la denuncia ante el Consejo para la Ley y los derechos humanos.

Muchos de estos crímenes no son denunciados pues se considera que “la institución más homofóbica es la Procuraduría del DF, porque es una autoridad manejada por hombres de pensamiento machista.”, explican integrantes de Asilegal, organización que en 2009 envió un informe a la ONU sobre el alto grado de homofobia en México.

Abrí el facebook. Regina me ha solicitado hacerme fan de un grupo en contra de las comunidades homofóbicas inmediatamente decido unirme. Descubro páginas cuyos nombres van desde “Ser gay es recalcitrante” “Por los que odiamos a los homosexuales ““En contra del matrimonio gay,” las puertas están cerradas para los homosexuales”, “Se aceptan todo tipo de agresiones contra los homosexuales”.

Inmediatamente revisé estas páginas. Videos deplorables, con una propaganda absurda que denota la ignorancia de las personas respecto al tema. Un medio que pudo servir para general redes de apoyo, se convierte, a su vez, crea redes de destrucción.

La capacidad de convocatoria que tiene facebook permite ver en tiempo real que incluso personas de ultra derecha, incluso jóvenes, sienten un profundo rechazo a personas homosexuales, mientras que otros abogan porque en la educación sexual que reciben los niños en las escuelas primarias, no incluyan a la homosexualidad como un “asunto normal, puesto que es una aberración”, argumentan.

“Lo que te choca, te checa ”Es un dicho popular que engloba muna teoría sobre la estigmatización. No estigmatizamos lo que no es ajeno diría Carl Gustav Jung, discípulo disidente de quien fuera el padre del psicoanálisis, Sigmund Freud. Esto es, las personas que tienen una aversión obsesiva y enferma hacia las personas homosexuales, muy probablemente están rechazando una parte de su personalidad, algún rasgo gay que no puede admitir en sí mismo y por tanto, agrede en los demás. (continúa)

1 comentario:

  1. Te leo ahora como prosista, luego de sumergirme en tu espacio de poesía.


    Saludos...

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